Desde hace unos años sabíamos que Luka Doncic era un talento del baloncesto que podía llegar muy lejos, la calidad la tiene, pero la capacidad de trabajo también para seguir mejorando en sus prestaciones.
Esta temporada vemos al esloveno mejorar en todas las facetas del juego, pero por su posición en la pista y la cantidad de balones que recibe el mejorar en el tiro es algo muy bueno, le hace más peligroso, tener más recursos y eso es a base de trabajo, mejorando en tiros de campo y tiros libres.